Este fondo que es falso de mi armario
arde en llamas por culpa de mis versos
guardan cola en espacios tan adversos
esos fatuos no tienen escenario.
Voces libres golpean a diario
apretadas se queman entretelas
con el fuego se encienden unas velas
se me alumbra ese todo necesario.
Saltan chispas de tinta en el papel
se rellena de sangre este pincel
papelera de heridas sin la cura.
Las ideas me llueven en plantel
la ceniza transpira su blancura
se convierten las letras en locura.